La nueva y revolucionaria imagen revela con un detalle sorprendente un disco protoplanetario alrededor de la estrella HL Tau, muy similar al Sol y situada a 450 años luz de la Tierra, en la constelación de Tauro.
Los nuevos instrumentos de ALMA han logrado mostrar detalles nunca antes observados de este sistema solar en formación, entre los que se incluyen una serie de anillos concéntricos y separdos por vacíos bien definidos. Dichas estructuras sugieren que, en estos momento, varios planetas están en pleno proceso de formación alrededor de la jovan estrella.
«Esas estructuras -afirma el director de ALMA, Stuartt Corder- se deben con todo seguridad a una serie de jóvenes cuerpos planetarios que se están formando en el interior del disco. Lo cual no deja de ser sorprendente, ya que HL Tau no tienen más de un millón de años de edad y no esperábamos que estrellas tan jóvenes dispusieran ya de cuerpos planetarios tan grandes como para producir las estructuras que vemos en la imagen».
La creencia general es que todas las estrellas se forman en el interior de nubes de gas y polvo que colapsan bajo su propia gravedad. Con el paso del tiempo, las partículas de polvo que siguen flotando alrededor de la estrella recién nacida se van uniendo en objetos cada vez más grandes, desde granos de arena a piedras y grandes rocas que terminan por formar un disco de material alrededor de la estrella misma. Ese disco puede dar lugar a asteroides, cometas y planetas propiamente dichos.
Una vez que estos cuerpos adquieren la masa suficiente, transforman por completo la naturaleza del disco en el que nacieron, formando anillos separados por espacios vacíos a medida que los planetas van "limpiando" sus órbitas del resto de escombros y "pastoreando" los restos de la nube original de gas y polvo hacia regiones muy concretas.
La nueva imagen de ALMA revela precisamente esta clase de estructuras, y en exquisito detalle, proporcionando la mejor y más detallada imagen que existe hasta el momento de un proceso de formación planetaria. Hasta ahora, esta clase de imágenes solo podían verse como resultado de simulaciones informáticas o en ilustraciones artísticas. Pero ALMA ha proporcionado una imagen real, y una prueba de que la Naturaleza y las teorías de los científicos estaban, en este caso, en perfecta sintonía.
"Este nuevo e inesperado resultado nos proporciona una vista increible del proceso de formación de planetas", afirma Tony Beasley, encargado del manejo de ALMA en Norte America.
HL Tau no puede distinguirse en el espectro de la luz visible debido, precisamente, a que se encuentra tras un tupido velo de gas y polvo. Pero desde que ALMA es capaz de observar en más longitudes de onda, ha podido penetrar esa barrera para observar con todo detalle lo que sucede justo en el núcleo de esa nube. El resultado ha sido una de las imágenes más notables que existen sobre esta clase de procesos naturales. El nivel de detalle es tan exquisito que resulta incluso más impresionante que el de muchas imágenes ópticas.
La posibilidad de ver cómo nacen planetas alrededor de una estrella ayudará a los astrónomos a comprender mucho mejor cómo se formaron los mundos de nuestro propio Sistema Solar.
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