Los astrónomos han averiguado que la mayoría (alrededor de la mitad o hasta el 85%) de los puntos luminosos que vemos en el cielo nocturno son estrellas múltiples: es decir, parejas o tríos de estrellas (e incluso grupos mayores); sencillamente, están tan lejos que solo vemos un punto individual. Entonces, ¿es el Sol excepcional por ser una estrella única?
Pero lo cierto es posible que en el pasado no fuera así, y que el Sol tuviera realmente una pareja. Puede parecer inverosímil pero es la hipótesis recientemente propuesta por un grupo de astrónomos para explicar la existencia de la nube de Oort, una vasta región en las afueras del sistema solar en la que existen cientos de miles de millones de cuerpos helados, y cuyo origen no está del todo claro. Sus conclusiones se han publicado en « Astrophysical Journal Letters».
No hay comentarios:
Publicar un comentario