24/2/09

Telescopio del Polo Sur - Una mirada al Big Bang


El recientemente estrenado Telescopio del Polo Sur, ubicado en ese lugar, buscará pistas sobre el origen mismo del universo; con las cuales se buscará confirmar las teorías de Albert Einstein y entender la "energia oscura" fuente de la expansión misma. Le brindamos una inetresante nota a el profesor John Carlstrom de la Universidad de Chicago y líder del equipo del SPT (South Pole Telescope - Telescopio del Polo Sur) y los detalles mismos del telescopio y de su construcción en las extremas latitudes del globo.

En el primer instante de la creación, una fluctuación microscópica en la densidad dentro de la fábrica del espacio y del tiempo dió lugar al nacimiento de todo lo que vemos ahora.

La fecha de este big-bang: 13.700 millones de años. La teoría describe un universo inflacionario: una súbita, increíble e inimaginable expansión que haría que el universo, encerrado en un espacio similar al tamaño de un átomo, alcanzase las dimensiones actuales en un espacio de tiempo increíblemente pequeño.

Si algo así hubiera ocurrido, de acuerdo con la teoría de la relatividad de Einstein, tendría que haberse producido una señal muy débil, en forma de ondas gravitatorias. Las ondas gravitatorias no se han descubierto aún, pero es bastante probable que existan. "Si las detectas, lo que te están contando es mucho sobre la inflación de nuestro Universo", ha comentado John Carsltrom, en la reunión anual de la Sociedad Americana para el Avance de la Ciencia (AAAS en inglés).

Carlson es el responsable de un proyecto que va a capacitar al recién estrenado telescopio del Polo Sur para emprender la búsqueda de estas ondas. Si aparecen, gran parte de los misterios que rodean al big-bang podrían dejar de serlo, ya que, de acuerdo con Einstein, estas enormes fluctuaciones de densidad que originaron que el Universo se inflara súbitamente como un inimaginable globo habrían causado perturbaciones en el tejido del espacio tiempo en forma de "ondas".

La gravedad

Einstein imaginó que la gravedad no es una fuerza de atracción, como Newton lo dispuso en su ley, sino una distorsión en el espacio tiempo causada por los cuerpos masivos. Cuanto mayor fuera la masa, más distorsión causaría el cuerpo en cuestión. Es algo similar a colocar una bola de plomo en una sabana hecha de goma; la bola se hunde. Si ahora echamos a rodar una canica por la sábana, la canica caerá hacia el centro donde está la bola, dando círculos, como si estuviera "atraída" por ella. En realidad, algo así sucede con los planetas que giran alrededor del Sol.

Eso explica que la atracción de la gravedad, que disminuye con la distancia aunque nunca termina por esfumarse, pueda sentirse de manera "instantánea": de hecho, Júpiter ejerce una fuerza gravitatoria sobre nosotros, por ejemplo. Y también la galaxia más lejana. La gravedad no viaja más rápido que la luz puesto que es una perturbación en un tejido espaciotemporal en el que el tiempo es también una dimensión.

Y en este extraño mundo, las alteraciones en forma de ondas gravitarias alteran el tejido. La esperanza de Carlstrom es que los aparatos incorporados al telescopio polar sean lo suficientemente sensitivos como para detectar esas ondas. Puede que tenga suerte en estos próximos diez años.

Energía oscura

Y no es que haya mucha prisa. Pero lo cierto es que el Universo está plagado de misterios, como la misteriosa "energía oscura", que al parecer está acelerando la expansión de las galaxias, haciendo que cada vez la atracción gravitatoria sea más débil entre ellas. El cosmólogo Lawrence Krauss, uno de los mejores del mundo, que investiga actualmente en la Universidad de Arizona, cree que esa misteriosa energía terminará por borrar los rastros del big-bang, de forma que dejará al Universo "sin memoria".

"En el futuro muy lejano, toda la evidencia acerca del big-bang desaparecerá, y los científicos que haya entonces pensarán que viven en un Universo eterno y estático", ha indicado en la reunión de la AAAS, en una interesante conferencia titulada 'nuestro Miserable Futuro'.

Claro que tendrá que ser en un futuro realmente muy lejano -donde quizá ya no haya científicos- aunque Krauss pone el dedo en la llaga, al hacer preguntas que hoy por hoy, no tienen respuesta: ¿Están fijadas las leyes de la naturaleza, o son simplemente un resultado del ambiente? "Vivimos en un tiempo muy especial dentro de la historia del universo", ha indicado este experto. Un tiempo en el que los cosmólogos podrán encontrar algunas de las respuestas para intentar explicar por qué el Universo es como es.

Detalles de la construcción y carácteristicas del telescopio

El costo del SPT (Telescopio del Polo Sur) es cercano a los $19.2 millones de dólares, fue financiado en forma primaria por la Fundación Nacional de Ciencias así como también por la Kavli Foundation, de Oxnard, California, y la Gordon y Betty Moore Foundation, de San Francisco, California, todas de los Estados Unidos.



El telescopio tiene una altura de 22.5 metros, un ancho de casi 10 metros y pesa 280 toneladas. Fue construido y probado en Kilgore, Texas, Estados Unidos, enviado por barco a Nueva Zelanda y de ahí al Polo Sur. Desde noviembre de 2006, el SPT ha estado bajo la orientación del encargado principal del proyecto Steve Padin, científico en astronomía y astrofísica de la Universidad de Chicago, Estados Unidos, el cual reensamblo y desplegó el telescopio. Como todo proyecto de construcción en el Polo Sur, requirió una enorme cadena logística en todo el mundo. Fue llevado a bordo de un avión LC-130 al polo sur, volando desde el aeropuerto de La Guardia en Nueva York.

El SPT está diseñado para realizar estudios sobre la misteriosa energía oscura.
Los astrónomos que trabajan en el Polo Sur toman ventaja de las excelentes condiciones de observación que hay en estas latitudes la atmósfera fría y seca arriba del Polo Sur permitirá al SPT detectar más fácilmente la CMB (Radiación Cósmica de Fondo en Microondas), que es el resplandor dejado por la Big Bang, con interferencia mínima por el vapor de agua.
En el espectro electromagnético, la CMB cae entre las ondas de radio y la parte visible. La CMB es bastante uniforme, pero contiene pequeñas ondulaciones que reflejan variaciones en densidad y temperatura. Estas ondulaciones serían las huellas de las semillas que, por atracción gravitacional, habrían dado lugar a las galaxias y a los cúmulos de galaxias visibles para los astrónomos, en el cielo actual.



El SPT es el primer proyecto científico que estudiará estas pequeñas variaciones en la CMB para determinar si la energía oscura pudo afectar la formación de los cúmulos de galaxias, luchando contra la gravedad, al menos hace unos pocos miles de millones de años. La CMB permite a los astrónomos acercarse a la infancia del Universo, cuando tenía apenas 400.000 años de edad. En ese entonces, aún no había estrellas o galaxias. Si la energía oscura cambió la forma en que el Universo se expandió, debió de haber dejado "huellas" a lo largo del camino que forzó a las galaxias a separarse.
En este punto, cuando la energía oscura es importante, el SPT usará el llamado fenómeno del efecto Sunyaev-Zeldovich. Este efecto distorsiona la CMB cuando pasa a través de un gas caliente en los cúmulos de galaxias. Cuando las microondas interactúan con el gas de estos cúmulos, algunas de las microondas son golpeadas y alcanzan frecuencias más altas. El SPT medirá las diferencias asociadas con el cambio de frecuencia y producirá una imagen del gas en el cúmulo. El SPT podrá escanear grandes regiones del cielo en forma rápida. Los científicos esperan detectar miles o aún cientos de miles de cúmulos de galaxias dentro de pocos años.

Fuente: http://ecodiario.eleconomista.es/ciencia/noticias/1056893/02/09/El-telescopio-del-Polo-sur-emprende-una-busqueda-para-acercarse-al-principio-del-tiempo-y-del-espacio.html
http://www.cielosur.com/mensajero/astronom/20070226a.php

Mail: grupo_gabie@yahoo.com.ar
Web: www.grupogabie.blogspot.com

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